El pasado mes de abril de 2022 el Euribor, el índice de referencia en España para la actualización de las hipotecas a tipo variable, se situó en el 0,013%. Fue todo un hito puesto que era la primera vez que el índice acababa en positivo tras más de un lustro en tipos negativos.
Por aquel entonces muchos ciudadanos empezaban a temer cuál sería el efecto de una subida de este índice en sus hipotecas. A lo mejor los hipotecados pensaron que lo sensato era acudir a los expertos.
En una entrevista publicada apenas quince días después de conocer ese dato, el Gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, reconocía la subida pero calmaba los ánimos, asegurando que las hipotecas iban aumentar «pero en cualquier caso estamos hablando de unos niveles muy reducidos«.
Otros quince días después de las declaraciones de Hernández de Cos, ya a finales de mayo, los principales gurús bancarios ofrecieron sus vaticinios cuando el Euribor en mayo ya había ascendido hasta el 0,287%. Las predicciones fueron las siguientes:
- Bankinter: Euribor al 0,4% a finales de 2022 y en el 0,8% en diciembre de 2023
- BBVA: 0,5% a finales de 2022
- CaixaBank: 0,53% a finales de 2022, y podría acabar en el 1% en 2023
- iAhorro: Podría llegar al 1% antes de que comience 2023
- Quadriga Funds: sobre el 0,4% a finales de 2022
La realidad es que el Euribor cerró diciembre de 2022 en el 3,018% tras protagonizar la subida más vertiginosa de su historia, y va camino de cerrar diciembre de 2023 entre el 3,7% y 3,8%.
No sólo es que ningún experto acertara, es que ni se acercaron lo más mínimo ni intuyeron la que se venía encima a sólo siete meses vista. Y ojo, no estamos hablando de los videntes que predicen el horóscopo en televisión, sino de reputados economistas con unos salarios elevados precisamente por su capacidad para analizar y predecir este tipo de movimientos, entre otros.
El Gobernador del Banco de España, sin ir más lejos, tienes unos emolumentos anuales cercanos a los 220.000 euros, más del doble de lo que cobra el Presidente del Gobierno (cerca de 90.000 euros). Con un cargo oficial, uno podría esperar que lo dice tuviera algo de validez.
No hagas planes en función de lo que leas por ahí
Todo esto para recordar a los sufridos hipotecados a tipo variable que rastrean internet casi a diario para saber cuándo va a bajar el Euribor que dejen de hacerlo. Podríamos recopilar las previsiones de este mes igual que hemos hecho con las de 2022 y dentro de un año veríamos que, una vez más, nadie ha acertado.
Lo sensato es siempre prepararse para las revisiones anuales o semestrales de la hipoteca con tiempo, analizando el Euribor en su estado actual y poniéndose siempre en el peor escenario.
Analiza cuánto va a subir tu cuota hipotecaria y si puedes y te interesa amortizar para bajarla. Y, en caso de que vayas a tener problemas para pagarla, comienza a negociar con tiempo con tu banco. Con los desahucios parados y en la situación económica actual, todos los bancos están interesados en negociar una solución antes que asumir un impago contra el que no tienen demasiados elementos para actuar.